'Soy

miércoles, 13 de enero de 2010

El rincon merengue de Germinal. El Madrid baila sobre la nieve

Domingo, 10 de Enero de 2010

17ª Jornada de Liga

Estadio Santiago Bernabéu, 60.000 espectadores (casi lleno)

Real Madrid C.F. (2) - R.C.D. Mallorca (0)

Gélida, borrascosa y nada apetecible se presentaba la tarde en el Bernabéu para ver al Madrid y no sólo por la nieve y el frío temporal sino también por las dudas y el atasco generado en Pamplona la semana anterior pero la maquinaria volvió a funcionar contra viento, marea y, en este caso, nieve para regalarnos una buena tarde de fútbol y proclamar a los cuatro vientos que la maquinaria no se congela, que sigue muy viva y engrasada y a todo gas para afrontar todo lo que venga.

Comenzó el partido con un Kaká muy bien plantado, una vez superada su pubalgia, pero con falta de minutos, Marcelo en el lateral se preveía como coladero aunque luego estuvo aseado y apagó fuegos cuando ya sacábamos los aficionados el extintor. Garay y Albiol sobrios y solventes en defensa puesto que Aduriz no se mostró muy activo por aquello del frío o la impresión de ver tanto blanco. Se nota la mano del profesor Manzano en este Mallorca que dejó de ser un equipo vulgar y sufridor para creerse algo más y querer hacer un buen fútbol con dos jugadores muy sobresalientes anoche a pesar de la derrota. Grato sabor dejó el Chori Castro y Julio Álvarez ambos sutiles y muy bien encajados en este equipo. El Madrid mandaba y comandaba un partido del que se fue adueñando poco a poco a fuerza de martillear la meta de Aouate. Si el Madrid usaba estos años atrás un martillo para perforar a sus oponentes este año pega mazazos contundentes que se reflejan en casos como los del gol del Pipa Higuaín cuando Alonso (¡cuánto bien le hace al Madrid!) rescata un balón perdido en el medio campo y asiste para el argentino que, aún con el desdoble de Arbeloa por su costado, se revolvió en la frontal para enchufar un cañonazo con la izquierda que se cuela como un obús por la escuadra del portero israelí del Mallorca. Golazo de los gordos no como los que marca otro afamado argentino beneficiario de grandes campañas mediáticas.

El Madrid siguió percutiendo con un Ronaldo incansable, luchador, rematador y un Kaká en plan de fino estilista pero que aún necesita el tiempo y la confianza de los partidos para olvidar su lesión y hacer mella a los rivales. Gago se muestra como un jugador aseado, un poco militar en su forma de jugar y que espero mucho más de él si se deja de pucheros y rebeldías con las miras puestas en el mundial aunque fue muy correcto y ayudó bien a Alonso a contener el medio campo con las acometidas de Borja Valero.

Gran ocasión tuvo Ronaldo después de un pase de Arbeloa que, después del control, no atinó a encontrar el remate. Van der Vaart fruto de la mala fortuna o del frío se topó con una lesión que le mantendrá en el dique seco - ahora que veíamos a un buen jugador- de 2 a 3 semanas por rotura fibrilar. Fue sustituido por el "pirata" Granero. De ahí al descanso, salvo un cabezazo del Mallorca que supuso algo de peligro y una internada en el área salvada entre el error del delantero y la ayuda de Marcelo al corte, todo siguió igual con un Madrid muy mandón.

El segundo tiempo mantuvo la misma tónica y fruto de ese dominio en el minuto 7 se fraguó el segundo y definitivo gol del partido después de que Higuaín recogiera una pelota por la derecha y en la línea de fondo la puso para que Granero fusilara por bajo a Aouate y pusiera el segundo tanto del partido y cerrara la victoria madridista. A partir de ahí sucesión de ocasiones donde nuevamente Kaká tuvo dos muy buenas para cerrar el partido y Granero una tercera donde el portero visitante sacó una mano mágica que impidió el tanto. El Real debe mantenerse firme en el medio del campo esté Lass o no esté, mantener la pelota y la cabeza fría para controlar los partidos porque las pérdidas en esa zona pueden ser, a veces, mortales de necesidad. Anécdota del partido fue cuando el defenestrado y criticado Guti hizo su aparición sobre el césped entre más aplausos que pitos de la parroquia local dejando en 10 minutos pinceladas del genio que lleva dentro aunque a veces se le cortocircuite la cabeza y se convierta en un demonio o un pasota.

En fin, que estamos ahí, que mi equipo no baja los brazos y cada día alimenta más la esperanza de poder recuperar lo que por derecho nos pertenece como son el trono europeo y la corona de España pese a campañas mediáticas y cierta caverna catalanista comandada por un pseudo personajillo que se hace llamar presidente de una gran institución como es el Barça y que siente un complejo de inferioridad tremendo y una envidia corrosiva que no le deja vivir hacia todo lo que representa el Real Madrid.

Como resumen de la jornada decir que el Sevilla se tambalea mucho mal que le pese a su presidente después de fardar diciendo que tiene la mejor plantilla de España. El atleti maquilla su situación con goles y el Valencia es el que toma el testigo como tercero en discordia detrás de los dos grandes. Lo del Barcelona se veía ver su victoria puesto que visitaron feudo amigo y el Tenerife se dejó ganar después de aquellos dos maquiavélicos contubernios de los años 90 para arrebatar ilegítimamente dos ligas al Real Madrid y el club canario llevárselo calentito. Por cierto, Guardiola se declaró como forofo del equipo isleño y que tiene en su debe el hacerse socio del club tinerfeño. Cómo diría cierto humorista; ¡AHORA VAS Y LO CASCAS!

Un saludo.

2 comentarios:

malagueto1 dijo...

Excelente crónica D. Merengón, pero la enturbia un poco con sus puyasitos al Barcelona.
Sea cabal y reconozca que el Barça ha hecho lo que nadie en el mundo y si le pica, ¡¡rascase !!.
Cuando su blanquísimo equipo haga o supere a los catalanes, raje lo que quiera, mientras a tragar kina y agua y ajos....

Saludos

Nico28 dijo...

Perdone abuelo Malagueto pero yo fui el primero en reconocer la superioridad azulgrana el año pasado. Lo que pasa es que no conviene subirse a la parra porque cuando algunos van otros ya han vuelto y han dado dos vueltas valga la redundancia sobre lo que otros se vanaglorian.

Germinal