'Soy

domingo, 8 de enero de 2012

Desigualdad y Opacidad

Desigualdad y Opacidad

Mariano Aguayo. Tribuna Libre. El Mundo. 18 de Mayo.

“Siempre se dijo que, en nuestra querida España, había dos fiestas nacionales: los toros y las oposiciones. Con la reordenación del sector público de la Junta de Andalucía que acaba de publicarse en el BOJA, en Andalucía, sólo quedan los toros, pues las oposiciones ya no van a ser necesarias en mucho tiempo.

Los actuales responsables del Gobierno han metido a ejercer funciones de empleados públicos a miles de personas sin que medie oposición alguna ni, por tanto, concurran los principios fundamentales para el acceso a la Función Pública en condiciones legales de igualdad, mérito y publicidad.

El movimiento ciudadano de los miles de Empleados públicos de Andalucía, que durante los últimos doce meses se han dejado la piel en la calle para que la sociedad reaccione acerca de sus reivindicaciones, debe de llevamos a una reflexión en profundidad acerca de lo que está ocurriendo. Quizás lo que están protagonizando los empleados públicos sea el movimiento espontáneo y libre más importante de nuestra historia en democracia. Es de una trascendencia fundamental que, sin vinculación alguna con partidos políticos ni organización subvencionada alguna, los empleados públicos lleven, horas, muchas horas, días y meses en la calle defendiendo una causa que es de todos, pues los fundamentos del Estado de Derecho son los que están a punto de saltar por aires si lo publicado en el BOJA va adelante. No es una cuestión de intereses particulares lo que se está dilucidando en Andalucía; son los fundamentos que deben garantizar la legalidad en el funcionamiento de la administración.

Para nuestro despacho de abogados es un honor haber sido elegidos, entre los magníficos profesionales que hay en Andalucía en el mundo del Derecho, para defender esta compleja causa. Nos supone una sorpresa que varios miles de empleados públicos den el paso adelante de encargar una defensa, tan compleja, costosa y dura sin perseguir un beneficio directo y egoísta.

Simplemente por la tranquilidad de que en Andalucía se siga, por ellos, por sus hijos y por los hijos de sus hijos, concurriendo legalmente con todas las garantías a la Función Pública. Y lo que es tan importante como lo anterior, que la Función Pública se pueda ejercer entre profesionales que han concurrido legalmente a su puesto y que no tienen que agradecer a nadie su incorporación.

De prosperar la reordenación del sector público andaluz, tal como se ha publicado, el poder, el poder del día a día, el que se consuma por la resolución de la distribución de los concursos o la resolución de los expedientes administrativos en las sanciones a los ciudadanos se ejercerá por personas que accedieron a su puesto de trabajo sin los requisitos básicos que exige la ley para ejercer la función pública. Accedieron en base a la confianza, proximidad o el criterio que en cada momento el responsable de su empresa tuvo por conveniente aplicar.

Esto supondría que salten por el aire las bases de las garantías que cualquier ciudadano tiene ante la Administración; si el señor que se sienta frente a usted ha sido colocado, no por sus méritos, no por su capacidad, no concurriendo con otros, sino con un criterio absolutamente privado de selección sin garantía alguna, usted estará indefenso. Es el control en el ejercicio del poder el que estamos decidiendo en estos días en Andalucía.

Lo que vamos a tener el honor de defender en nombre de miles de empleados públicos anónimos, que de manera absolutamente altruista están apoyando esta defensa, es la garantía de que la Administración sirva al ciudadano, no a los intereses de algunos. Vamos a recurrir todos y cada uno de los actos que entendemos pueden consumar el despropósito generado por la reordenación, además de la violación de derechos fundamentales. Vamos a pedir justicia cautelar, pues entendemos que sólo suspendiendo esta chapuza como de manera coloquial la hemos llamado, podemos dar eficiencia a la defensa.

Los ciudadanos, los empleados públicos de Andalucía, se han echado a la calle para gritar al poder que no siga por ese camino. No los han escuchado y han acelerado el paso sin mirar hacia abajo. Ahora los jueces de Andalucía, esos jueces valientes e independientes que los ciudadanos deseamos tener, tienen la palabra.”

Mariano Aguayo Fernández de Córdova es abogado y defiende a una plataforma de funcionarios.

Entrevista a Mariano Aguayo en El Mundo

No hay comentarios: